La marca automovilística española SEAT ha destacado por su importancia en la historia de España
Seat fue líder de ventas en España durante muchos años y tuvo éxitos notables en competiciones automovilísticas. Entre los modelos de Seat, destaca el icónico Seat 600, el vehículo que motorizó España y se convirtió en un símbolo de movilidad para la clase media.
La creación de Seat fue un esfuerzo por llenar la necesidad de vehículos en España tras la Guerra Civil. En 1950 nace la Seat que conocemos hoy, como colaboración entre España y Fiat. Seat se instala en Barcelona debido a la industria auxiliar y al puerto, que permitía una relación ágil con las fábricas italianas de Fiat. El primer coche producido fue el SEAT 1400, un vehículo destinado principalmente a uso oficial y como taxi. En 1957 aparece el SEAT 600, un coche más accesible y popular entre la clase media, que jugó un papel clave en la motorización de España.
Otros modelos significativos fueron el SEAT 850, el SEAT 124, el SEAT 127, y el SEAT Panda, entre otros muchos. En todos los casos, se trata de modelos imprescindibles para entender la historia automovilística de España. A principios de los años 80 FIAT abandona SEAT y, tras un corto período en solitario en el que creó mitos como el primer SEAT Ibiza, fue comprada por el Grupo Volkswagen. Ya dentro de este grupo, diseñó superventas como el Seat Toledo o el Seat Córdoba. SEAT no ha sido sólo una marca de vehículos, sino también parte integral de la historia y cultura española. Una marca que cambió el país para siempre como pocas cosas antes lo habían hecho.